El propósito de la práctica de
gestión de proveedores es asegurar que los proveedores de la organización y su desempeño, sean gestionados adecuadamente para propiciar el suministro continuo de productos y servicios de calidad. Esto incluye la creación de relaciones más cercanas y colaborativas con proveedores clave para revelar y producir valor nuevo y reducir el riesgo de fallas.